SUEÑO
Te llamé. Me llamaste.
Brotamos como ríos.
Alzáronse en el cielo
los nombres confundidos.

Te llamé. me llamaste.
Brotamos como ríos.
Nuestros cuerpos quedaron
frente a frente. vacíos.

Te llamé. Me llamaste.
Brotamos como ríos.
Entre nuestros dos cuerpos,
¡que inolvidable abismo!

Emilio Prados "Memoria del olvido"