Dioses y Hombres



Somos, religiosamente, la generación perdida... o tal vez el nuevo eslabón en la evolución mística.
Nacimos al amparo de una educación temerosa de dios y  hemos crecido en una sociedad laica y vertiginosa.
Estamos perdidos en nuestro mundo de convicción atea pero con los miedos de nuestra infancia creyente.
Para mí es una lucha diaria e incesante de la que sé no me podré desembarazar jamás. Solo me queda dejar escapar esa opresión en forma de poemas.
Siento, mientras completo este poemario,  que una parte de mí me sigue juzgando.
   
"la esencia de la libertad consiste en que el hombre es el fin de si mismo, el único artífice y creador de su propia historia."  Así describe el Concilio Vaticano Segundo (Gaudium et Spes) el Ateísmo Sistemático.




POEMAS


PREFACIO

Yo creo en el hombre,
Con sus luces y sombras,
Con sus guerras y misericordias,
Con sus instintos y sensibilidades.

Yo creo en un hombre claro,
Apegado a la tierra
Y no en un dios velado,
Escondido tras la nube.



POESÍA ORIGINAL

Que hermosa paradoja
Que el pilar de tu palabra
Que el cimiento de tu fe
Sea la voz del poeta.

Que es sino el profeta
Adulador del alma
Un frágil historiador
Y espontáneo cronista.

Origen de tus misterios
De líneas inacabadas
Empíreas palabras
Y realidades sin nexo.


 

 
MI VIDA

Mi vida, mi conciencia,
Incluso la mala,
Busca salvarse
Mendigando caricias.

Pero hay un poso,
Lodos de mi infancia
Que me doman
Enturbiando ese deseo.

Es una batalla perdida.
Si la evito se evapora
Si me enfrento
Acabo por evitarla.

Maldigo los dioses
Viejos e impuestos,
Sus rezos y encantamientos,
Me conforto en su piedad
pero maldiciéndolos los temo.

Maldigo esas promesas
Célicas y divinas,
Sus glorias y edenes,
Me conforto en su vergel
pero maldiciéndolas me aplastan.


Amo gente impura
A los ojos de dios
De la que no dudo
De su justicia
Ni de sus planes de amor.




PROCESIÓN DIVINA

Es el mismo viento
El mismo cielo que entregaba la lluvia
A las resecas praderas y oía los cantos
En los balbuceos del hombre.

Es el mismo cielo
El mismo viento que marcó los tiempos
Germinando el sustento y vió los templos
En los temores del hombre.

Es el mismo viento
El mismo cielo que iluminó la razón
Desnudando los viejos miedos
Y dominó las supersticiones.

Es el  mismo cielo
El mismo viento que secó la sangre
De los amargos sacrificios
Y derrumbó los marmoles olímpicos.

Es el mismo cielo
El que vió pasar antiguos dioses, ahora
Hermosas fábulas que nos divierten
Y descubren nuestra ignorancia.

Es el mismo viento
El que verá pasar nuestros dioses, entonces
Hermosas fábulas que nos divertirán
Y descubrirán nuestra ignorancia.


 
ERAN OTROS TIEMPOS

Eran otros tiempos cuando
La sangre de los pueblos
Detestó la cruel decepción
Del viejo evangelio social.

Eran otros tiempos cuando
El alma aciaga del hombre
Cebó el ansia desmedida
De una nueva fe personal.

Eran otros tiempos cuando
El yugo del desheredado
Agitó una revelación
De angustiosas revueltas,

Pero... Eran otros tiempos.




BREVIARIO MONOTEISTA

Yahvé habló a Moisés
y eligió su pueblo.

En su pueblo nació Jesús
y legiones le siguieron

Y Mahoma aceptó a Jesús
Como profeta admirado.

Oh extraña intervención divina.

El pueblo de Moisés
Ya nunca se dejó amar.

El pueblo de Jesús
se obstinó en sus misterios

Y el pueblo de Mahoma
encerró a Dios entre sus manos.




EL VIAJE

El hombre debe amor al hombre
El hombre se debe humanidad.

El hombre debe perdón al hombre
Por la senda fiel, sin profecías,
Sin brumas ni miedos que le lastren.

Si el hombre esta en calma con el hombre
No necesita más compañeros de viaje.




SOLEDAD DE DIOS

La eterna soledad celestial,
Tan lejana, debe estremecer.
En esa amplitud espacial
Tanto amor debe disiparse.

Si estas tan solo en las alturas
Para que crear el cielo.
Si estamos tan solos en el mundo
Para que crear la tierra.

¿Por qué te empeñas en ocultarte?
¿Por qué nos niegas tu existencia?




MI SOLEDAD

Una soledad que aplasta.
Es la bendición inmensa
De mi mente racional
Que analiza mi camino,
Discute mi presente
Y descifra mi destino.

Una soledad patente.
Es la ofrenda que concedo
A mi rebelde inquietud.
Huérfanos y semejantes
Nos confiamos dominantes
En una tierra cohabitable.

Una soledad universal.
Observando el cielo astral
Es la verdad meditada
Sin padre altísimo,
Sin pulso resurgido.
Soy leve y caduco.




PROMETEO

Un haz de luz iluminó
Los inviernos del hombre.

A la fría arcilla,
A la bestia primitiva
Llegó la llama del amparo.

La despiadada sombra de Zeus
Era un águila voraz, que engullía
Cada día el renacido hígado
De nuestro padre protector.

El hombre se sintió amado
Y el castigo del Dios fue atroz.




PENSAMIENTO

La voz de Dios no es sino
El propio eco examinando nuestra conciencia.

La tentación no es sino
El instinto primitivo de supervivencia.




EL VERDADERO MILAGRO

El verdadero milagro es
Que de la áspera y basta tierra
Del insípido e incoloro fluido
Surja la cadena de sustento
Para seres de elástica materia.

Verde primitivo y virgen
Frágil nido de mariposas
Delicia trófica y primaria
De fecunda desmesura.

Y el amor hace el resto
Nuevos juegos de pasión
Engendrando nuevas vidas
En eterna progresión.

El verdadero milagro es
Que del enlodado y sucio barro
Del nuboso y torvo cielo
Surja la cadena de sustento
Para seres de carnoso cuerpo.




MUERTE DE LOS PRIMOGÉNITOS

La pureza en esencia,
La carne de blanca bondad,
La mirada sin violencia.

Así eran los hijos de Egipto
Dulzura viva para sus madres
Príncipes muertos para tu pueblo.

El Rey Divino aniquiló tu fruto
Y el ángel de tu cólera fuiste tú.
Asolando inocencias y futuros.




ORACIÓN

La plegaria, en su gesto y oratoria
Sosiega el ánima beligerante.

La oración, mirada lanzada al cielo
Emociona el espíritu quebrado.

La plegaria, ese impulso del corazón
No cambiará el curso de la historia

La oración, ese grito de amor
No cambiará los hilos de tu vida.




DOS SENTIMIENTOS HUMANOS

Si el espíritu se conmueve
Ante el amor de una madre
Y si el alma se retuerce
Ante la muerte de un hijo,

Son las sangres mortales que
Mezcla un solo corazón;
Roja como el sol
Negra como el abismo.




DECEPCIÓN

Yo estuve en la basílica
Morada del hijo de Jonás
Vi el exceso y la riqueza
Donde pregonan la universalidad de los bienes.

Yo anduve por sus salas
Algunas de indecente soberbia
Sentí la mayor de las vergüenzas
Donde pregonan la universalidad de los bienes.

Yo huí del gran templo
Morada del nuevo apóstol
Arrastrado por el tormento
Donde pregonan la universalidad de los bienes.




MUERTES INÚTILES

Una fértil tierra bien vale
La guerra de los hombres.
Alimentar al hijo bien vale
la lucha de los hombres.
Es la muerte por la supervivencia.

Un paraiso celeste no excusa
la guerra entre hermanos.
Imponer una fe no excusa
la lucha entre hermanos.
Es la muerte por lo intangible.




GÓTICO

Hay mas luz en la modesta y oscura ermita
Que en la luminosa y descomunal catedral.
El arte se arrodilla, es siervo de simbolistas
Donde las santidades son jueces sin piedad.

Ahora se lucha por este afán majestuoso
Que enfrenta a los pueblos y los arruina
De pan, los enreda con castigos tenebrosos
Bajo la crecida bóveda y su girola.

Arte demoledor, instrumentalizado
Que espesa el aire con fuego e ira
Oprime la voluntad del hombre amenazado
Aplastado por imágenes sin misericordia.

Hay mas luz en la humilde y penosa huerta
Que en la lustrosa y arrogante ciudad
El hombre se depura, es libre de simbolistas
Donde las estaciones son jueces sin piedad.




AMOR ETÉREO
De que sirve un amor infinito pero etéreo,
Si los golpes de esta vida
Rompen mi corazón en pedazos.




CONFESIÓN

Los ojos miran adentro,
Analizando la culpa.
La nuca se tensa y anuda
Sintiendo el quebranto.

Que bien vendría una calmante confesión,
Como una carrerilla de palabras decoradas
Como una enredadera de deseos floridos
Que indultan sin censura en un santo y amén.

La boca muerde inquieta,
Explorando la herida.
El pecho se hunde y ahoga
Advirtiendo el desanimo.

Que bien vendría despojarme este tropiezo
Como un mal paso en tenebrosa senda
Como un mal recuerdo de sombrío sueño
Que atormenta y perdura mi condena.

Que bien vendría confesar esta culpa
Para poder seguir pecando.




VIENDO ESTE MUNDO

Viendo la mar
En el pasional agosto
Viendo el cielo
En el despejado enero
Viendo la tierra
En la fértil primavera…

Me niego a creer que esta vida
Sea un mero purgatorio,
La simple brevedad de mi crónica eterna,
Donde expiar un pecado ajeno y original,
Un rosario de penitencias y perdones
Por cada paso hecho y cada pensamiento dado.

Viendo este mundo
En este precioso instante
Me niego a creer que esta vida
Sea un mero purgatorio.




PREDESTINADO

Me parieron maleable
Dentro de la normalidad,
Endeble y huesudo
En mi particularidad.

Me criaron en afectos
Dentro de la naturalidad,
Sensible y sociable
En mi subjetividad.

Crecí inquieto
Dentro de lo convencional,
Buscando una vida
En mi peculiaridad.

Vivo feliz
Dentro de la cotidianidad,
Con golpes y alegrías
En mi privacidad.

Quiero morir calmo
Dentro de la familiaridad,
Con los mejores recuerdos
En mi intimidad.




SIN ESCONDER LA CABEZA

Hay cargas de derrumban
Y días sin esperanzas.
Hay vacios que lastran
Y noches entre amenazas.

Solo nos queda luchar
Y volver a levantarnos
Sin esconder la cabeza
Bajo el abrazo de Dios.

Hay castigos sin piedad
Y días sin treguas.
Hay hambres que queman
Y noches entre censuras.

Solo nos queda templar
Y despojarse el desprecio
Sin esconder la cabeza
Bajo el abrazo de Dios.



SACRILEGIO

Hoy me he sentido bendecido
Mientras recibía a un hombre
Calmo, sonriente y sincero
Tan sincero que podría ser Dios.

Hoy me he sentido bendecido
Mientras escuchaba a un hombre
Dulce, sereno y tierno
Tan tierno que podría ser Dios.

Hoy me he sentido bendecido
Mientras despedía a un hombre
Humilde, sensible y puro
Tan puro que podría ser Dios.




MEDIOCRIDAD

Extinguirme en la mediocridad
Que se desliza pesadamente
En cada rutina horaria
Entre albas y ponientes.

Extinguirme en la mediocridad
Que va engullendo mis dones
Que una vez creí tener
Ocultos en contraluces.

Extinguirme en la mediocridad
Con mis efímeros hermanos
Valientes a la verdad y
Sin alas para elevarnos.



INCOMPRENSIÓN

La imagen de un elefante
Tallado en su propio marfil es vacía,
Porque el elefante no alcanza a comprender
La belleza inspirada por un tallador.

La imagen de un hijo
Sacrificado por su propio padre es desgarradora,
Porque una criatura no alcanza a comprender
El dolor causado por su creador.

La imagen de tantos hombres
Enterrados por su propio Dios es estéril,
Porque los hombres no alcanzan a comprender
La muerte provocada por su redentor.




SUEÑO DE ABRÍL

Debio ser como una nube
Una enorme masa informe
Un gran capuchón penitente
Que invadía cielo y calle

Es la turbia e inestable
Idea que se ennegrece
Como ceniza al aire
Antes vida, agua y carne.

Debio ser como la mano
Que derrumba viejos dioses
Con la fuerza del aliento
Que aviva la negra nube.

Todavía esta la nube
anclada en el fondo del cielo.